viernes, 5 de octubre de 2012

Pretérito imperfecto del indicativo

Ni el aire es como el que respirábamos,
ni las nubes iguales,
ni el azul del cielo es el mismo
si contigo no puedo compartirlo.

El color de las calles, lo material,
la piedra, los cruces que había,
los árboles que nos rodeaban,
la gente, las luces, las prisas...


Mi oxígeno por el tuyo,
aunque es mucho más que eso,
ya no es una necesidad,
ni un requerimiento...

Suplemento o complemento.
Suplementábamos calles,
las hacíamos nuestras.

Ahora mismo somos imperfectos,
porque falta algo.
Espero al futuro perfecto
nada más que a tu lado.

1 comentario:

  1. Ni que decir tiene que entiendo esta poesía como las otras que escribes. Es algo que agradezco ya que como sabes, de nada me vale que una poesía sea de Juan Ramón Jiménez si no entiendo palabra.

    Supongo que en el alma de estos párrafos lo que quieres expresar es el cambio de aires y como lo llevas. Nunca he tenido ocasión de irme tanto tiempo, así que no tengo esa experiencia. Debe ser duro que nada sea igual que antes, ni que nada sea igual que aquí.

    Me quedo con las dos primeras estrofas, que son las que para mí mejor transmiten lo que sientes.

    Una poesía muy bonita como es costumbre, y espero que sigas escribiendo así (aunque tarde en leerte).

    -Rubén-

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